Por los pocos datos que se tienen, es posible calcular que las ganancias obtenidas mediante el Content-ID de YouTube son bastante altas para los derecho habientes como para la propia red social.
Como sabemos en YouTube podemos encontrar de todo. Desde contenido original de cualquier usuario promedio, o aquel que tiene copyright. En medio de todo eso, proteger a los titulares de derecho puede considerarse complicado. Para facilitarlo, YouTube utiliza el sistema conocido como Content-ID.
Este mecanismo supone que, en el caso de que una obra se publique, ya sea directamente o transformada, dentro de YouTube, se detecte si utiliza elementos de otras obras usando algoritmos y a través de la inteligencia artificial. El titular de la obra copiada, total o parcialmente, podrá entonces decidir o bien retirar el contenido infractor o monetizarlo a su favor. Esto supondría, a su vez, el emplazamiento de anuncios en el contenido infractor y el beneficio se dividiría entre la red social y el titular de los derechos infringidos.
Tal como señala un artículo de TorrentFreak, los niveles de negocio que generaría este sistema de Content-ID para para Youtube son bastante altos. Aunque no se tienen datos exactos porque Google no publica este tipo de información sobre YouTube, podemos hacernos una idea mirando las cifras de la búsqueda indexada y cruzándolas con otras informaciones dadas por Google.
Las cifras del contenido infractor retirado por Google y del Content-ID
En lo que llama datos de transparencia, Google reportó este año la retirada de 5 mil millones de contenidos en su motor de búsqueda por infracción de propiedad intelectual. Es un número enorme, pero un dato similar no se ha publicado para YouTube. Sin embargo, hay también otros datos sueltos que se han publicado por parte de YouTube que nos permiten hacer una estimación.
Así, en 2017, reportó más de 7 millones de vídeos retirados por medio de la solicitud DMCA, es decir, a través del ejercicio de la Digital Millennium Copyright Act americana. Esta permite solicitar la retirada de contenido infractor de derechos de propiedad intelectual en el portal en el que se está publicando. Google también afirmó que sólo un 2% de las solicitudes que recibía se realizaban utilizando este mecanismo y que, generalmente, se realizan por medio de Content-ID, el propio sistema interno de YouTube.
Esto supone, según los números que nos han dado, unos 350 millones de reclamaciones contra la piratería producidas internamente a través del Content-ID de YouTube. También informó Google de que los titulares de derechos suelen solicitar la retirada de contenido infractor solo un 10% de las veces y, el resto, suelen solicitar su monetización. En el caso de la música es todavía más: el 95% de los autores o titulares de los derechos de la banda de música de que se trate solicitan la monetización en lugar de la retirada.
Monetizar y ganar por anuncios como si fueran sus propios contenidos
Esto, por tanto, supone que la mayoría del contenido nunca llega a retirarse, sino que en lugar de ello, se establecen anuncios y esto es un gran negocio para Google. Pues, por medio de YouTube, obtiene pingües beneficios por esta publicidad.
Del mismo modo lo hacen los titulares de propiedad intelectual, que reciben las regalías establecidas por YouTube como si fueran anuncios en sus propios contenidos. Por tanto, solo con la muestra del número de vídeos que se monetizan, se puede entender la cantidad de dinero que esto puede generar para YouTube.
Asimismo, debemos considerar que frecuentemente los vídeos que se monetizan tienen decenas o incluso cientos de miles de visualizaciones. Está claro que por un lado, esto es muy positivo, puesto que significa el cumplimiento de la normativa y la protección de los titulares de la propiedad intelectual. Además resulta beneficioso económicamente y a nivel de negocio.
Aunque quizá deberíamos tener en cuenta también, que es muy común también que este tipo de reclamaciones pueden derivar en abusos del derecho. Dando lugar a situaciones como eliminación de contenidos que no utilizan obras ajenas o que las utilizan legítimamente dentro de los límites del fair-use.
Finalmente, YouTube está generando un nuevo sistema para prevenir las infracciones de propiedad intelectual a través de un sistema de checks previos a la publicación.