Los hack roms mejoran la calidad de los videojuegos, pero infringen el copyright de las desarrolladoras.
Nostalgia gamer. Muchos videojuegos de culto del pasado son editados por fans para darles mejores características en lo que se conoce como hack roms. Este es el caso de GTA3 y Vice City, que han formado parte de un proyecto para adaptarlos a la tecnología actual. Sin embargo, esto no le ha parecido tan bueno a la propietaria de los derechos, Take-Two, que ha pedido darlos de baja en GitHub invocando la Digital Millenium Copyright Act (DMCA).
La noticia la dio Eurogamer, sitio que previamente había hecho un artículo sobre la aplicación de ingeniería inversa para la obtención del código fuente sobre el que trabajaban los proyectos. Y se reseña que Github habría aceptado la petición de la propietaria de los derechos. Contrario a lo sucedido con la solicitud hecha por la MPA.
Estos proyectos, que reciben los nombres de RE3 y REVC, consisten en un open source para la comunidad gamer que permitía explorar y modificar a gusto, varios elementos del juego. Así como introducir nuevos mapas, mods o ports.

Las mejoras hechas por los fans en los hack roms
De este modo, mejoraban con creces ciertos aspectos técnicos y de calidad con respecto a las versiones originales de GTA 3 (del 2001) y de Vice City (del 2002). Por ejemplo este proyecto, permitía que estos juegos disponibles para PC, también pudieran usarse en otros terminales como Nintendo Wii o Play Station Vita.
En consecuencia, no sólo se reproducía la obra sino que, en cierta manera también, transformaba la misma. Pero de acuerdo a los líderes del proyecto, este solo tenía fines educativos y documentales. Y requería de la compra del juego original para aplicar las variaciones.
Sin embargo, Take-Two, titular de todos los derechos de edición de todas las obras desarrolladas por Rockstar Games, presentó una queja por infracción de derechos de autor. En esta solicitud, la editora facilitó a GitHub una extensísima cantidad de enlaces donde supuestamente se podían descargar los códigos fuentes de estos títulos. Así como aseveró que en ningún caso concedió, ni se le había solicitado, una licencia para autorizar este uso o reproducción.
Finalmente todos los enlaces de descarga han sido retirados. Y los proyectos RE3 y RECV por ahora han quedado un poco en el aire. Sin embargo, sus editores ya tienen otros hack roms en proceso, como el de Super Mario 64, de la también muy celosa de sus derechos, Nintendo.