En los juicios por defensa del secreto empresarial será importante que se identifique claramente lainfracción.
¿Cómo diferenciar la información que es considerada secreto empresarial de aquella que es de conocimiento general o relativa al expertise de una profesión? Ese suele ser uno de los mayores dilemas en los casos de defensa del secreto empresarial ante un tribunal.
La cuestión es que las empresas demandantes suelen ser poco específicas al respecto, entre otras causas, porque no quieren que dicho secreto se divulgue. Sin embargo, en aras de la justicia, esta información deberá ser más explícita para otorgarle el derecho al acusado la oportunidad de defensa. Y para que el juez pueda conocer con detalle suficiente la cuestión para determinar quién tiene la razón de su lado.
De esta situación habla un artículo reciente del sitio estadounidense IP Watchdog. En él se comenta que un fallo de la Corte de Apelaciones del Noveno Circuito de Estados Unidos ha establecido la necesidad de documentar más ampliamente la demanda. Así, en el juicio se requiere aportar la documentación que justifique específicamente cuál es el secreto concreto que se viene a recoger y cuál es su relevancia empresarial.
Esto, más allá de los requisitos usuales en este tipo de procesos: que se trate de un secreto identificado que no sea generalmente conocido, que tenga un valor económico y que se hayan adoptado medidas razonables para su protección.
Los principios de la Conferencia de Sedona
Una opinión que es compartida por la Conferencia de Sedona, una organización estadounidense dedicada a la educación e investigación legal. Comparte, además, una serie de principios que deben seguirse durante los litigios por defensa del secreto empresarial:
- Su identificación no implica necesariamente que la demanda tenga el mérito supuesto y tampoco debe sustituir la etapa de presentación de pruebas.
- Debe presentarse por escrito, y en una etapa temprana del proceso, la documentación que permita identificación del secreto empresarial en disputa.
- Esta identificación debe ser lo más particular posible dentro de las circunstancias específicas de cada caso.
- Dicha identificación es plausible de ser corregida a medida que avanza el caso.
Influencia de esta tesis en la defensa del secreto empresarial en España
La Ley de Secretos Empresariales en España es de reciente publicación (2019) y toma como referente a la Defense Trade Secrets Act, estadounidense. Esto se debe a que EEUU es el país cuya normativa es la que tiene mayor tradición en secreto empresarial a nivel mundial.
En razón de ello, es de suponer que es muy probable que nuestro país asuma esta jurisprudencia para su propios procedimientos judiciales. Y nos puede servir para establecer nuestros propios sistemas de defensa del secreto empresarial.
Como ya sabemos, esto requiere adoptar una serie de medidas de inventariado. De este modo, debe indicarse cuál es el nivel de protección de la información y saber si es accesible por unas u otras personas o por distintos conjuntos. Además, sería necesario inventariar la documentación secreta haciendo referencia a qué activos con carácter de secreto empresarial son los que protegen.
De esta manera esta jurisprudencia nos permite establecer sistemas de compliance de la protección del secreto empresarial más exhaustivos. Puesto que nos da el fundamento de que resulta necesario, no sólo tener la documentación bien protegida e inventariada, sino que también es necesario para servir de una especie de base de datos que nos permita saber qué secretos empresariales tenemos en nuestro poder. Asimismo, nos permite conocer en qué documentos concretos se apoyan cada uno de esos secretos empresariales, hasta formar el cuerpo conjunto de cada uno de los secretos protegidos con un valor económico.