El bloqueo a Twitter levantó las alarmas por los derechos de los ciudadanos rusos.
Fuente: Canal de YouTube Actualidad IP & IT
Después de que las autoridades rusas amenazasen públicamente con el bloqueo a Twitter en su país, la situación ha bajado de tono. Pues de acuerdo a la autoridad de las comunicaciones rusa, Roscomnadzor, Twitter ya ha respondido a sus solicitudes de eliminar parte del contenido prohibido.
Si bien el plazo inicial fue de un mes, parece que se ha tomado como una buena señal el avance hecho por Twitter desde el ultimátum ruso. El objetivo total eran más de 31 mil contenidos ilegales referentes de violaciones a la Propiedad Intelectual, enaltecimiento del terrorismo, suicidio, consumo de drogas ilícitas, pornografía infantil, etcétera.
De acuerdo al portal Semana, Twitter habría respondido que es parte de su política luchar contra dichos delitos. Por lo que ha considerado los pedidos de Rusia “como una discusión productiva”. Inicialmente, el Roscomnadzor había criticado que Twitter no respondía a sus peticiones de retirada de contenidos.
Las VPN y Telegram
Asimismo, Rusia advirtió que se bloquearán también servicios VPN (redes privadas virtuales) que permitan a los residentes de ese país eludir medidas como el geobloqueo. Recordando así lo sucedido con Telegram en 2018, cuando su servicio fue restringido en el país.
Años atrás, Telegram también había recibido un ultimátum similar al de Twitter. Y, considerando que el servicio de mensajería se caracteriza por su anonimato y privacidad, la petición del Gobierno ruso de compartir las claves de encriptado, iba en contra de sus políticas. Rusia alegaba, por su parte, que quería monitorizar la actividad de los usuarios para eliminar contenido prohibido.
Porque es conocido que Telegram es una de las redes sociales donde este tipo de contenido es muy habitual. Sin embargo, resulta muy difícil aplicar cualquier medida técnica de protección fuera de la plataforma porque está totalmente cifrada.
Ante la negativa de la red de mensajería instantánea, Rusia bloqueó 1,8 millones de direcciones IP administradas por Google y Amazon que utilizaban Telegram. Posteriormente, además, ordenó a los proveedores de servicios de internet el bloqueo de más de 50 VPN. Aunque finalmente, Telegram ha resurgido en el país con una nueva versión de su aplicativo.
Restricciones similares a las redes sociales y VPN van en detrimento de los derechos y libertades de los residentes rusos. Pues no necesariamente se usan para actividades ilícitas ni muchísimo menos.
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