La mediación y la conciliación han hecho mucho por el hecho de que el Valencia CF pueda hoy usar su logo.
Finalizó la disputa del Valencia CF vs Batman, o mejor dicho, versus DC Comics. Pues tras un acuerdo, por fin el club deportivo va a poder utilizar su logotipo conmemorativo del centenario, un murciélago dorado muy similar al que representa también al antihéroe de Ciudad Gótica.
Es que el Valencia Club de Fútbol y DC Comics llevan negociando un pacto que contente a las dos partes desde 2019. Y tras varios meses, efectivamente DC retiró su oposición, dándole vía libre al equipo de fútbol español para poder registrar su logotipo.
Aunque, como siempre, en este tipo de acuerdos hay uno que tiene que ceder. En este caso, ha sido el Valencia, que si bien podrá utilizar esta marca, lo deberá hacer dentro de los límites del sector deportivo. Sus bienes y servicios no podrán en ningún momento representar un personaje de ficción por cuanto no debe existir riesgo de confusión con el mítico personaje creado por Bob Kane y Bill Finger.
El conflicto surgió en 2014 cuando DC Comics había presentado un recurso contra unos diseños del club, que presentaban al murciélago. El cual es una figura representativa de este equipo de fútbol desde hace bastante tiempo antes de la creación del personaje de ficción. Y, a su vez, este tendría su origen en una tradición de la ciudad de Valencia, que es representada desde el siglo XVI por este mamífero.
Pero fue en junio de 2018 cuando la enemistad de ambas empresas escaló, tras el intento de registrar ante la EUIPO el signo del murciélago. El cual asemejaba bastante al símbolo utilizado por Batman. Y por ello DC presentó una oposición al registro de la misma considerando que había un riesgo de confusión.
El cool off
No obstante, una técnica legal en este tipo de casos, suele ser el “enfriar” la situación o cool off, gracias a la cual se le permite a las partes ver si pueden llegar a un acuerdo. O, por el contrario, seguir con el conflicto. En este caso, un examinador decide si efectivamente hay o no un riesgo de confusión. Es, precisamente, durante este periodo cuando las partes decidieron intentar llegar a un acuerdo y -efectivamente- hubo éxito.
Pero en este intervalo, el Valencia sí pudo hacer uso de la marca sin problemas. Y una vez acabado, llegaron al acuerdo de que el club deportivo solo se enfocaría en productos de la clase 41 y poco más, que fue lo solicitado.
El caso del Valencia CF vs Batman es bastante interesante en el sentido de cómo precisamente se puede a través de la mediación y la conciliación, lograr algo beneficioso para todos. Aquí, la posibilidad de admitir el registro de la marca gracias a que las partes pusieron un poco de su parte. Lo que podría replicarse en casos similares o en otras situaciones.