Las afirmaciones publicitarias engañosas de Google le han originado una demanda colectiva.
En el verano de 2019 Google lanzó una campaña publicitaria masiva para dar a conocer su nuevo producto: Google Stadia. Un servicio de videojuegos online que ofrecía a los jugadores, acceder a varios títulos del sector en resolución 4K, aún con velocidad de internet baja, y 60 fotogramas por segundo (fps).
Sin embargo, en octubre pasado, a apenas más de un año de su lanzamiento, esta plataforma ha recibido una demanda colectiva de parte de sus usuarios ante la New York Federal Court. ¿El argumento? Haber realizado afirmaciones publicitarias engañosas.
Porque resulta que, una vez lanzada en noviembre de 2019, los usuarios pudieron descubrir que Google Stadia estaba repleta de errores. Los juegos no rendían los 4K anunciados, , ni siquiera 1080, sino 720 píxeles.
Esto, de acuerdo al portal Classaction.com, que refiere que otras empresas que han sido señaladas por los demandantes fueron los desarrolladores Bungie e ID Software. Todos los cuales indicaron en diversos medios que los videojuegos de su sistema serían mucho más potentes que los ofrecidos por la competencia de Playstation 4 Pro o de Xbox One X . Lo cual tampoco resultó ser cierto.
Un gran despliegue publicitario
Pero no fueron simples afirmaciones. Se presentaron también varios clips y adelantos del título Doom Eternal, que mostraba una excelente resolución, logrando obtener buena crítica de la prensa especializada. La compañía de California también alimentó la expectativa indicando que la versión de Red Dead Redemption 2 tendría una calidad de 4k y 60 frames por segundo.
El lanzamiento de este aparato, que venía a revolucionar la industria del videojuego ofreciendo los mismos servicios y calidad que una consola pero sin necesitarla, empezó por todo lo alto. Así, comenzó con una campaña de reservas y pre compras en la que Google puso a disposición de los usuarios diversos packs.
El Founder’s Edition, Premium Edition y Pro Edition con un coste máximo de 129 dólares. Monto que, según Google, era considerablemente menor a los 300 dólares que realmente valían. Todos estos packs de precompra quedaron rápidamente agotados. Para luego ser lanzado con un periodo de prueba gratuita.
Google no se ha retractado por las afirmaciones publicitarias engañosas
Estos son los fundamentos de la demanda por supuestas prácticas comerciales desleales y engañosas relacionadas con la calidad publicitada y la resolución de los juegos en Stadia. Pues, como resultado de esas falsas afirmaciones, se alteró la decisión de compra de cientos de miles de consumidores por todo el mundo. Quienes se han visto alentados a comprar este aparato por una calidad del producto que no tiene.
Y, a pesar de las evidentes imprecisiones, Google nunca se ha retractado de sus declaraciones. Cuando a sus ejecutivos se les interroga al respecto responden siempre con negativas, cómo ocurrió con un comunicado de noviembre de 2019.
Sin embargo, silenciosamente Google ha modificado las descripciones de sus títulos en Stadia. Ahora, en el apartado de resoluciones ahora puede leerse que la misma dependerá de la velocidad de internet del usuario.
